Todas las noches la veía,
suspiraba mientras dormía.
Tras la ventana la observaba,
mientras la noche acababa.
Pronto llegó el amanecer,
y la hora de desaparecer.
Un hombre desgraciado,
a la vez que enamorado.
Vuelve a su humilde casa,
mientras ella descansa.
Una princesa de castillo,
con un hombre de rastrillo,
Una historia de amor
que sólo provoca dolor.
Una princesa de palacio
con un chico de barrio.
Un corazón herido
y un hombre perdido...
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